Hay un poema maravilloso de Pia Tafdrup que se titula
La fuerza de gravedad del cielo
En las horas de un día fatigoso y largo, hubo un momento en que quise escribir:
si pudieras verme ahora
El sol se pone, un dolor momentáneo
desgarra a mi padre.
Me siento con él, le cojo la mano,
conocido y desconocido
- no se la he tenido así nunca antes.
Horas antes de leer el poema de Tafdrup pensé
¿dónde están mis iguales?
Y un poco después alguien dijo:
los árboles que crecen a las orillas de los ríos, los alisos, los abedules,
de todos ellos me siento cercano.
Descansé unos segundos en esas palabras
antes de volver a experimentar, desconcertado, la fuerza de gravedad del cielo.